Camilo Aldebaran, el adolescente de 14 años que confesó haber asesinado a su madre, padre y hermanito de tres años, mantenía una relación virtual con su novia desde hace seis años. La niña, quien en ese entonces tenía nueve años y él ocho, fue quien, según las investigaciones, habría presionado al menor para cometer el crimen que ha dejado perplejo al mundo.
El asesinato ocurrió cuando Camilo disparó a sus padres con una pistola que su padre, Antonio Inaila Teixeira, guardaba debajo del colchón. La autopsia reveló que la causa de la muerte fue un disparo, y todo fue orquestado en un momento de oportunidad cuando los padres no estaban despiertos. Camilo pidió dormir con ellos para aprovechar la ocasión y cometer el crimen.
Las autoridades investigan el caso bajo dos líneas de investigación: una se enfoca en el posible plan de los adolescentes para que, tras la muerte de los padres, Camilo pudiera cobrar el seguro de vida familiar; mientras que la otra se centra en una venganza personal que el menor habría sentido en relación con sus padres.
¿Cómo se conocieron los adolescentes?
Camilo y su novia virtual se conocieron durante un juego en línea hace seis años. En el último año, su relación se consolidó y comenzaron a tener una relación de noviazgo, que llegó a ser tan profunda que la adolescente, ahora de 15 años, presionó a su novio para que cometiera el crimen como una manera de demostrar su amor. Según las versiones, ella lo instó a ser “un hombre” y castigar a sus padres con la muerte.
El juego en línea en el que se conocieron les dejó una fuerte influencia, ya que se basaba en una historia de terror psicológico en la que dos hermanos, con una relación incestuosa, matan a sus padres. Trascendió que esta influencia fue clave en la decisión de los menores.
El caso de Camilo sigue bajo investigación, y ha dejado consternado a Río de Janeiro y al mundo entero debido a la edad de los implicados y la macabra historia detrás del crimen.