El basurero ilegal ubicado en la colonia Terremoto ha sido clausurado en siete ocasiones, y a pesar de los esfuerzos por desactivarlo y remediar los daños, persiste como un problema. La Dirección de Gestión Ecológica y Manejo de Residuos del Ayuntamiento de la capital ha intervenido en múltiples ocasiones para intentar mitigar el impacto ambiental, sin embargo, carece de las facultades necesarias para proceder con su eliminación definitiva.
Se ha confirmado que los recolectores que utilizan este predio para desechar residuos provienen únicamente de Soledad de Graciano Sánchez, y el propietario del terreno cobra una cuota por permitirles depositar la basura. A pesar de las clausuras, el propietario parece estar bien asesorado legalmente, lo que le permite continuar con la actividad ilegal.
Además, se sabe que los responsables del basurero suelen prender fuego a los desechos, lo que genera una grave contaminación atmosférica, liberando más de 2,400 toneladas de dióxido de carbono.
Aunque la Dirección Municipal de Gestión Ecológica ha realizado esfuerzos para frenar la situación, las acciones de clausura no han sido suficientes para erradicar el problema. Por su parte, la autoridad estatal en materia ecológica sería la encargada de tomar medidas definitivas al respecto.
El Ayuntamiento también llevó a cabo un estudio de impacto ambiental a través de la Coordinación Municipal de Derechos Humanos, basado en entrevistas con los habitantes de la colonia Terremoto y zonas aledañas. Sin embargo, los resultados del estudio aún no han sido divulgados al público.