sábado, septiembre 7, 2024

Emergencias

Fecha:

Comparte esta noticia:

¿Qué sucede ante alguna emergencia? ¿estamos preparados? ¿nuestras autoridades lo están? 

En casi todos los ámbitos de la vida vale más estar prevenidos, que no estarlo. Cuatro supuestos comunes en nuestro país: temblores, inundaciones, incendios y sequía. ¿San Luis Potosí tiene los elementos para responder ante alguna de estas catástrofes?

De inicio, consideramos que nuestro Estado es un consentido de Dios, porque además de nuestra posición geográfica que nos sitúa en zonas de poco movimiento telúrico y lejanos a las costas marítimas, tenemos pocos acontecimientos catastróficos. 

La Licenciada María Irene Pérez Baltazar, a través de la Coordinación de Ciencias Sociales y Humanidades, realizó un estudio en el que recopila datos de las amenazas naturales en San Luis Potosí, de los años 1960 al 2010. Resulta muy interesante que se registraron hasta ese año 264 amenazas naturales, de las cuales el 60% corresponden a lluvias e inundaciones, el 10% a sequías, el 8% a heladas, 6% incendios forestales, 5% a vendavales, 2.6% a bajas temperaturas y granizadas, 2.2% a nevadas, 1% a altas temperaturas y el 0.7% a sismos. Desde luego, este estudio tendría que ser actualizado a los últimos 14 años, pero nos sirve de base para ver que, en el transcurso de esos 50 años, el mayor problema natural del Estado Fueron las lluvias y gran parte de esto en la Huasteca. 

Debido a que en México y sin escaparnos, en San Luis Potosí, predomina la reacción y no la prevención, no tomamos conciencia ante las posibles eventualidades que pueden ocurrir y dado que, no hemos tenido grandes catástrofes, lo más seguro es que ni siquiera lo hayamos pensado. No contamos con las medidas, planes, prevenciones y cuerpos de respuesta, para casi nada. 

Tenemos suerte de que no nos ha sucedido una tragedia como el huracán Otis, que recientemente arrasó Acapulco, pero aún con nuestra suerte, lo poco que sucede nos afecta. La semana pasada el Naranjo, en la Huasteca, tuvo severas inundaciones por una tromba. Aquí en la capital, con media hora de lluvia la parte Oriente de la ciudad se vuelve un lago. 

Parte de esta falta de prevención esta en la planeación con la que se desarrolla nuestro entorno. Si sabemos que, en los últimos 50 años, el principal riesgo natural ha sido la lluvia, no entendemos por qué las obras nuevas que se están realizando no cuentan con elementos que colaboren a tener una mejor preparación. Si transita por avenida Industrias, cuente la cantidad de entradas de agua pluvial, se va a sorprender, y eso que es una obra recién terminada por Gobierno del Estado; en Salvador Nava, cuando llueve vea los encharcamientos que se hacen, producto de las casi nulas bajadas pluviales y así todas nuestras calles, todo nuestro Estado. Queremos agua, pero nos caen 3 gotas, aprovechamos una, desperdiciamos dos y nos ahogamos.  

Si nuestras autoridades no tienen la capacidad de respuesta que se necesita entonces nosotros de forma personal debemos considerar ser más prudentes y pensar en prevenir. Sí, nadie tiene tiempo, puede costar dinero y la mayoría de la gente anda en búsqueda del pan de cada día en lugar de pensar qué va a hacer si cae una tromba en su zona. Aun así, aunque seamos consentidos de Dios, aunque no lo pensemos, puede pasar y es ahí donde preferiríamos haberlo hecho. Desde la prevención de accidentes hasta estar preparados ante desastres naturales, nos compete a todos. Díganos ¿cuántos extintores tiene en su casa, en caso de algún incendio? ¿tiene planificadas sus rutas de evacuación en caso de emergencia? Pequeñas acciones de prevención pueden hacernos grandes diferencias, desde tener un kit de primeros auxilios para emergencias médicas hasta tomar un curso de primeros auxilios o tener pensado un plan de contingencia y saber a dónde pedir ayuda. Incluso acercarnos a nuestras autoridades en este ámbito a pedir asesoría puede resultar mejor de lo que pensamos. 

No estamos vaticinando un apocalipsis, aunque esto funciona como un seguro de carro, el que lo tienes esperando no usarlo nunca, pero si lo tienes que usar te sientes muy aliviado de tenerlo. 

Artículos relacionados

Llaman a revisar reforma judicial sin prisa

Empresarios de Estados Unidos en México, agrupados en la American Society of Mexico, solicitaron ayer al Presidente Andrés Manuel...

Interapas no ha recibido notas de crédito por fallas de “El Realito”.

• El Organismo Operador de Agua fue notificado por la CEA de las notas de crédito y está...

‘Mi padre es uno de los mayores violadores en 20 años’

Dominique Pelicot es uno de los mayores criminales sexuales de los últimos 20 años. Así se refirió a su...

Reparten consejeros cargos en el INE

El Consejo General del INE aprobó la integración y presidencias de las comisiones permanentes y temporales para la operación de...