Los Reds con nuevo técnico abrieron la temporada en la Primera División de Inglaterra con la pierna derecha en su debut de la nueva temporada.
El Liverpool abrió la Premier League con victoria, 0-2 ante el Ipswich Town, gracias aMohamed Salah y de Dominik Szoboszlai, que llevaron a su equipo a una buena victoria en el nuevo proyecto con Arne Slot.
Ausente un referente como Jürgen Klopp, el Liverpool inició la ‘era Arne Slot‘ con un grupo totalmente continuista, sin fichajes (el único club de la Premier League sin caras nuevas) pero con el mismo reto de anteriores cursos: acabar con la hegemonía del Manchester City, que acumula cuatro títulos consecutivos y seis de los últimos siete disputados.
El exentrenador del Feyenoord tiene una labor titánica por delante. Ni más ni menos, que su público no eche de menos a Klopp, que sin duda dejó huella durante las nueve temporadas que se mantuvo en el cargo. Slot, con la experiencia de cinco cursos en la elite de los Países Bajos, ambiciona devolver a las vitrinas del Liverpool un título que no gana desde el curso 2019/20.
Para su primer once dejó fuera a Joe Gómez, con pie y medio fuera del club. Parece que el Liverpool puede prescindir de su central con la irrupción de Jarell Quansah, definitivamente asentado como referente atrás junto a Virgil van Dijk. Ambos aparecieron por su primer once de estreno junto a nombres ya clásicos como Luis Díaz, Mohamed Salah, Alexis Mac Allister o Dominik Szoboszlai. Cody Gakpo, se quedó en el banquillo.
Enfrente, el Ipswich Town de Kieran McKenna, disputaba su primer encuentro en la máxima categoría del fútbol inglés 22 años después. Su ascenso la pasada temporada, el primero desde la campaña 1999/2000, estimuló a sus aficionados, que llenaron hasta la bandera Portman Road para ser testigos del regreso a la elite de su club.