La Presidenta Claudia Sheinbaum dijo que se investiga si fue correcto el operativo que desencadenó un motín en el penal de Villahermosa, Tabasco, el cual dejó siete reos muertos y una decena de heridos, incluidos policías.
En conferencia, la Mandataria señaló que autoridades estatales deben proporcionar toda la información y también se indagará si hay nexos de criminales y funcionarios tras los hechos ocurridos la madrugada de ayer en el Centro de Reinserción Social del Estado (CRESET).
«Se está haciendo la investigación, también, para ver si fue correcto el operativo y por qué se encontraban armas dentro del penal», dijo.
«Se está investigando, se está investigando por qué fue esto, el propio operativo que se hizo por parte de las autoridades estatales y con apoyo de fuerzas federales, entonces se está investigando y se tiene que dar toda la información y si hay alguna colusión, también», advirtió.
Sheinbaum dijo que el caso de Villahermosa fue abordado hoy en su reunión de seguridad con el Gabinete federal y dijo que pedirá al Gobierno de Tabasco, que encabeza el morenista Javier May, que detalle cómo ocurrió todo.
«Lo vimos hoy en el Gabinete de seguridad, vamos a pedir el que vengan, pues que haya un comunicado a ver si se puede, el objetivo era trasladar a dos reos, dos personas privadas de la libertad, a otro penal, y al hacer el operativoencontraron armas en el penal y ahí hubo esta circunstancia de enfrentamiento.
«Pero tiene que darse toda la información, el propio Gobierno de Tabasco, vimos hoy en el video, estuvo presente para dar información a las personas que algún familiar está privado de su libertad para que se dé toda la información», reiteró.
Ayer, alrededor de las 5:00 horas, se desató un motín en el centro carcelario de la capital tabasqueña porque se quiso cambiar de cárcel a dos reos de alta peligrosidad. Durante el enfrentamiento, seis personas privadas de la libertad fueron lesionadas, así como cuatro policías.
Por la mañana, en medio de las protestas y desesperación de familiares de internos, el Fiscal estatal, José Barajas Mejía, había informado que sólo dos personas habían muerto. Pero la dependencia ministerial actualizó la cifra hasta la noche, luego de que en una breve conferencia de seis minutos durante la tarde, autoridades estatales no permitieron preguntas de la prensa.
A la par de lo ocurrido en el penal, se registró la quema de al menos nueve vehículos y cuatro tiendas de conveniencia en varios puntos de Villahermosa.
Dentro del CRESET se decomisaron un fusil AR-15, cinco pistolas calibre 9 milímetros, una granada de fragmentación, un cargador de fusil, tres cargadores para pistola, 27 cartuchos 5.56 milímetros, 8 cartuchos 9 milímetros, 5 radios, 7 celulares, 23 machetes, 14 cuchillos, 23 armas blancas hechizas, 541 dosis de droga, 81 dosis de cocaína en piedra y 460 dosis de marihuana.
Este viernes, al ser cuestionada por lo alarmante de que se hubieran encontrado armas en la prisión, la Presidenta Sheinbaum aseguró que en su Gobierno el trabajo de cumplir con la ley es permanente en la corrdinación de fuerzas locales y federales.
«El trabajo de pacificación, porque es eso, de pacificación y de cumplimiento de la ley, pues es un trabajo permanente y ahí donde ocurren estas situaciones pues tiene que hacerse una investigación, como en otras», añadió en su mañaneradesde Palacio Nacional.
En videos difundidos en redes sociales se observa cómo internos prendieron fuego y destrozaron el mobiliario del penal, mientras algunos celebraron las acciones con gritos.
En una rueda de prensa a las 14:15 horas, cuando se dijo que la situación ya estaba controlada, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Tabasco, Víctor Hugo Chávez Martínez, detalló que los policías fueron atacados a balazos al ingresar a la cárcel y se desataron los «actos vandálicos».
A las 8:00 horas, indicó, un reo «de interés» identificado como Gerardo «N» fue hallado en el área de calabozos sin oponer resistencia; a las 8:15 se logró un control parcial del penal y las 9:15 fue localizado otro interno, Javier «N», en el Módulo 4 y quien opuso resistencia con armas de fuego, y era resguardado por otros 20 reclusos.
Ahí se registró el mayor enfrentamiento hasta que lograron asegurar al objetivo y contener el motín.
