José Medina Vita, dueño de la boutique Vita Imports, negó que los 350 mil pesos que recibió del Gobierno del Estado, tras ser víctima de un robo, hayan sido un intento de «acallar el caso», como se ha especulado en redes sociales. Tras la polémica generada por la donación, Medina aseguró que no considera que merezca más apoyo que otros emprendedores que también han sufrido delitos o pérdidas materiales.
El empresario explicó que el monto otorgado no representa una proporción significativa de lo que le fue robado, y detalló que el apoyo será utilizado principalmente para recuperar la mercancía que pertenecía a sus clientes y que fue parte del botín. Además, insistió en que el propósito de este apoyo no es silenciar el caso, sino simplemente resarcir una parte del daño sufrido.
Medina también hizo un llamado a mejorar la seguridad en San Luis Potosí para todos los empresarios, y reafirmó que el apoyo recibido no fue para «acallar» su situación, sino como una medida para mitigar las pérdidas ocasionadas por el robo.
El apoyo y las reacciones en redes sociales
El anuncio del apoyo gubernamental generó una ola de críticas en las redes sociales, particularmente en la página oficial de la Secretaría de Finanzas (Sefin), donde se publicó el martes por la tarde que Medina sería beneficiado con 350 mil pesos tras el asalto a su tienda de ropa y calzado en la zona exclusiva de Lomas, en la capital potosina.
El mensaje de la Sefin, que hacía referencia a la titular Ariana García Vidal, justificaba el apoyo como un «acto de solidaridad y compromiso con los ciudadanos», con el fin de «resarcir el daño». Sin embargo, la respuesta de los usuarios no fue positiva. Muchos se quejaron de que no se les había brindado el mismo trato a otros ciudadanos que también han sido víctimas de delitos patrimoniales.
Algunos usuarios sugirieron que el gobierno debería hacer públicos los requisitos para acceder a este tipo de apoyo, mientras que otros pidieron que se considerara la posibilidad de recibir un apoyo similar si presentaban pruebas de los robos sufridos en sus propios negocios. También hubo quienes cuestionaron si el hecho de que Medina sea propietario de un negocio en una de las zonas más exclusivas de la ciudad influyó en la decisión del gobierno, lo que fue interpretado por algunos como un acto clasista.
“¿O sea, tiene que uno tener un negocio en Lomas para que el gobierno te apoye después de ser víctima de un robo?”, fue uno de los comentarios más recurrentes.