El Fondo de Pensiones para el Bienestar que ayudará a complementar las pensiones de trabajadores que cotizan bajo la ley del IMSS de 1997 o del ISSSTE de 2007, se financiará inicialmente con los recursos de 2.2 millones de cuentas inactivas que registran el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y las Administradoras de fondos para el retiro (Afores), esto en caso de que se apruebe lainiciativa de reforma que envió Morena al Congreso de la Unión.
Carlos Martínez, director general del Infonavit explicó a El Sol de México que estas cuentas inactivas son de personas que tienen más de 70 años y que no han sido reclamadas por diversas circunstancias como fallecimiento o porque la persona desconoce que tiene un ahorro en la Afore.
“El 88% de las personas se jubilan entre los 60 y 69 años de edad. Pero hay cuentas de personas de más de 70 años que no se han retirado, lamentablemente porque fallecieron o migraron y dejaron ese dinero (…) La idea de este fondo es que sea un pilar adicional del sistema de pensiones que se complementará con la pensión de adultos mayores que da el gobierno, y los que trabajan en la formalidad, reciban lo de su Afore”.
Martínez aclaró que si una persona mayor a los 70 años quiere reclamar el ahorro que tiene en su cuenta de Afore, lo podrá hacer pues «los derechos son imprescriptibles».
“Lo principal es que para el trabajador su derecho imprescriptible de cobrar o reclamar recursos se mantiene. No se tienen que preocupar de que sus recursos van a desaparecer», detalló el funcionario.
Pueden ir en cualquier momento al IMSS o Infonavit para reclamar el dinero de su subcuenta de cesantía o vivienda y se les va lo que les corresponda.
Carlos Martínez, director general del Infonavit.
El directivo del Infonavit comentó que lo que se propone en la iniciativa es el cambio de administración de los recursos de esas cuentas inactivas, pues actualmente las diezafores que conforman el mercado son las que administran estos recursos y de los cuales cobran una comisión bimestral mayor a 0.50 por ciento.
Es decir, las cuentas inactivas, que son aquellas que ya no reciben aportaciones constantes del patrón, trabajador y gobierno, ya no serán administradas por las afores, sino que pasarán al Fondo de Pensiones para el Bienestar.
Para ello se propone reformar el artículo 302 de la Ley del Seguro Social, donde se establece la creación de este fideicomiso.
La creación del fondo de pensiones servirá como un vehículo de coordinación para que el IMSS y las Afores puedan consolidar e invertir los recursos.
Además, servirá para «establecer una reserva con el objeto de respetar el derecho imprescriptible de los trabajadores de devolverles sus recursos”.
Martínez indicó que las cuentas activas seguirán dentro del sistema de afores como vienen operando hasta ahora y que el proceso de pensión se mantendrá igual. Es decir, una persona que tiene su cuenta activa, si a los 60 años quiere reclamar su pensión, la recibirá conforme a la ley del IMSS de 1997 o del ISSSTE de 2007.
En el mismo sentido, la Asociación Mexicana de Afores (Amafore) sostuvo que la reforma no representa una expropiación de recursos para los ahorradores.
“Es importante aclarar que la iniciativa no contempla ninguna expropiación de recursos. Lo que plantea es formalizar una transferencia de recursos que se ha estado haciendo ya desde hace algunos años”, dijo el organismo a través de un comunicado.
El organismo que representa a las Afores que operan el país abundó que dicha propuesta mantiene la condición de imprescriptibilidad de los recursos de los trabajadores, tal y como se estableció desde la reforma al sistema de pensiones hecha en 2020.
“Los trabajadores de México pueden confiar plenamente en la seguridad de sus recursos en el Sistema de Ahorro para el Retiro. Amafore manifiesta su voluntad de diálogo en cualquier política a favor de los trabajadores mexicanos”, indicó la Amafore, que preside Guillermo Zamarripa.
