La violencia contra las personas de la comunidad LGBTIQ+ sigue siendo una realidad cotidiana en San Luis Potosí. A pesar de los avances legales y del aumento en la visibilidad social, persisten los crímenes de odio, desapariciones, discriminación institucional y violencias psicológicas que afectan profundamente a esta población.
En conferencia de prensa, integrantes de organizaciones civiles denunciaron el abandono institucional y la invisibilización de estas agresiones. Paola Pedraza, activista de la colectiva Mutelas, informó que desde 2017 a la fecha han documentado al menos 27 casos de crímenes de odio y desapariciones de personas LGBTIQ+, especialmente mujeres trans, quienes enfrentan las formas más graves de violencia.
“Lo más grave es que muchos de estos casos no se investigan como crímenes de odio, no se documentan en las estadísticas oficiales y muchas veces quedan en el olvido. Son agresiones invisibilizadas por el propio sistema de justicia”, advirtió Pedraza.
La activista recalcó que la violencia no solo se expresa en asesinatos o desapariciones, sino también en consecuencias indirectas como el deterioro de la salud mental, suicidios y agresiones psicológicas derivadas de contextos de discriminación, exclusión y falta de acompañamiento.
Por su parte, el defensor de derechos humanos Andrés Costilla recordó que en 2023 se logró incorporar al Código Penal del Estado la agravante por delito de odio por orientación sexual e identidad de género, pero su aplicación aún enfrenta obstáculos.
Un caso emblemático fue el asesinato de una adolescente trans, cuyo agresor recibió una condena de 34 años de prisión. No obstante, el responsable actualmente busca obtener su libertad mediante un amparo. “Ese caso fue histórico, pero también nos muestra lo frágil que sigue siendo la justicia cuando se trata de crímenes contra la comunidad LGBTIQ+. No basta con que la ley exista, necesitamos que se aplique con fuerza y sin vacíos que permitan la impunidad”, señaló.
En tanto, Paul Ibarra denunció que las familias diversas siguen enfrentando discriminación, particularmente en el registro de hijas e hijos, donde se imponen procesos legales más largos y complejos que los de las parejas heterosexuales. Incluso, señaló, recientemente se negó el derecho al matrimonio civil a una pareja del mismo sexo debido a la falta de sensibilización de los funcionarios públicos.
Los activistas coincidieron en que persisten ausencias graves en el sistema social para garantizar salud integral, apoyo psicológico, justicia accesible y trato digno a las personas LGBTIQ+. Ante ello, convocaron a la ciudadanía a participar en la marcha del orgullo, que se realizará este sábado 5 de julio, a partir de las 4:00 de la tarde, saliendo del Parque de Morales con rumbo al Centro Histórico y de regreso.
La jornada incluirá talleres, conferencias y actividades culturales para visibilizar las luchas y demandas urgentes de la comunidad.
“Basta de discriminación, basta de crímenes de odio, basta de terapias de conversión”, fue el mensaje final de la conferencia, recordando que ninguna persona debería vivir con miedo por su identidad o expresión de género.