El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció este lunes al Papa Francisco en su fallecimiento asegurando que era un hombre bueno que trabajaba duro y ordenó que las banderas estadounidenses en edificios oficiales deberán ondear a media asta en honor a su memoria.
Sin profundizar más, y sin mencionar las profundas diferencias que los dividían, Trump dijo unas breves palabras sobre la muerte del Papa Francisco esta madrugada en Roma ciudad donde sostuvieron una audiencia privada junto a su esposa Melania Trump en 2017 durante su primer mandato de Gobierno.
«Acabo de firmar una orden ejecutiva para izar a media asta todas las banderas de nuestro país, tanto federales como estatales, en honor al Papa Francisco. Era un hombre bueno y trabajaba duro. Amaba al mundo y es un honor hacerlo», dijo Trump al inicio del tradicional juego de huevos de Pascua en la Casa Blanca.
Previamente en la red social Truth Social, Trump había pedido a Dios por bendiciones tanto para quien fuera el primer Pontífice católico procedente de América Latina como por sus seguidores. El Mandatario evitó comentar sobre sus diferencias abiertas en temas como la migración y el medio ambiente.
Desde su primera campaña presidencial en 2016, el Papa Francisco había sido crítico de la construcción del muro fronterizo con México para contener la migración irregular, y ahora en 2025 había calificado como una crisis mayor la campaña de deportación masiva de migrantes irregulares lanzada por Trump.
