El bloqueo que Estados Unidos mantiene contra Cuba desde hace más de 60 años ha sido un castigo cruel y un genocidio contra el pueblo cubano que ha visto imposibilitado su desarrollo económico, aseguró el Embajador de la isla en México, Marcos Rodríguez Costa.
En conferencia, el diplomático hizo un llamado al Presidente Joe Biden y los candidatos a la Presidencia de ese país, Kamala Harris y Donald Trump, a terminar con el embargo que como última consecuencia provocó un apagón masivo por falta de combustible.
«Es una cruel política de castigo, crimen de lesa humanidad y acto de genocidio. (Es una) violación flagrante, masiva y sistemática de los derechos humanos de los cubanos», sostuvo.
En la sede de la Embajada de la Ciudad de México, Rodríguez Costa dijo que el bloqueo es el principal obstáculo para el desarrollo de su país, el cual provoca daños multimillonarios que limitan la respuesta del Gobierno cubano ante la emergencia provocada por la falta de energía eléctrica.
Como ejemplo, expuso que del 1 de marzo de 2023 al 29 de febrero de 2024, el bloqueo ha ocasionado daños y perjuicios estimados en 5 mil 56.8 millones de dólares, lo que equivale a 421 millones mensuales, 13.8 millones por día y 576 mil por hora.
«Todas las dificultades de la sociedad cubana no se debe exclusivamente al bloqueo, pero faltaría a la verdad quien no lo reconozca como el principal obstáculo para nuestro desarrollo», indicó.
El Embajador cubano dijo que el apagón masivo se debió fundamentalmente a la falta de combustible para operar las plantas generadoras, sin embargo, también enfrentan problemas por la obsolescencia de los equipos por la dificultad de comprar refacciones ante las restricciones impuestas por Estados Unidos.
«La permanencia de Cuba en la lista unilateral e ilegítima del Departamento de Estado sobre países que supuestamente patrocinan el terrorismo, es una medida políticamente motivada y deshonesta, pero que tiene una connotación económica innegable», enfatizó.
«Se traduce en cierre de contratos, pérdida de relaciones con entidades bancarias, endeudamientos, demoras en el envío y recepción de fondos, alimentos, medicamentos, combustibles, materiales y piezas de repuesto con costos y consecuencias incalculables para el pueblo y la economía cubanas».