La cantidad de motociclistas multados por infracciones detectadas en el programa Salvando Vidas se multiplicó por siete en un año en la CDMX.
Al cierre del 2023 se registraron 12 mil 469 infracciones y multas, mientras que hasta el 20 de octubre de este año sumaron 92 mil 345, de acuerdo con datos de laSubsecretaría de Control de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
El incremento va de la mano con el refuerzo de los operativos de revisión que pasaron de 8 mil 946 a 20 mil 723.
Alberto Carrillo, presidente de la ONG Motociclistas Unidos de la Ciudad de México, señaló que las autoridades han puesto una mayor atención a los motociclistas por temas relacionados con el aumento del parque vehicular de ese tipo y los hechos de tránsito asociados.
También por la falta de cultura vial para usar la motocicleta, debido a que la gente se sube sin saberla manejar, lo que deriva en un gran número de lesionados y muertos.
«Lo que hace ahorita la autoridad es tratar de poner un freno, de alguna manera infraccionando al motociclista, pero lo que debería poner más bien sería capacitación para el motociclismo», dijo.
Adicionalmente, se registró un aumento en la cantidad de motocicletas remitidas al corralón, al pasar de 4 mil 464 a 8 mil 946 en el mismo periodo.
Aunque no portar casco es un motivo para que las motos sean remitidas al corralón, no en todos los casos ocurre y sólo se aplica la multa, de acuerdo con la SSC. Lo anterior porque el programa Salvando Vidas prioriza la concientización, de otro modo el número de ingresos de vehículos sería muy elevado.
Portar el casco es la medida de seguridad más desdeñada por los motociclistas de la Ciudad de México, de acuerdo con los resultados del operativo Salvando Vidas, pese a que el Artículo 37 del Reglamento de Tránsito así lo establece.
Del total de infracciones que se habían aplicado este año en CDMX, hasta el 20 de octubre, el 41.15 por ciento fueron por no llevar puesto el casco, refieren datos de la SSC.
«La Subsecretaría de Control de Tránsito está muy involucrada, sobre todo, muy preocupada porque la normatividad se lleve a cabo en cuestiones de seguridad, eso no significa que tengamos resentimiento contra la comunidad biker», afirmó Ramiro Rodríguez Saavedra, director de operación vial Zona 2 Centro.
«Únicamente queremos reflejar a la ciudadanía y a la población en general que el transporte en motocicleta es muy noble y merece respeto», agregó.
Carrillo señaló que la infracción por no usar casco ha inhibido el desacato, pero sólo en las vías donde se realizan los operativos, pues basta ir a las periferias y partes altas de la Ciudad para observar que la gente no lo usa porque no hay vigilancia.
Esto implica, agregó, que exista un subregistro, ya que sólo se sabe de esos casos, si hay un deceso e interviene la Fiscalía capitalina.
A ese motivo de infracción, le siguen estacionarse en lugares prohibidos, así como circular sin placa, sin licencia de conducir y sin tarjeta de circulación, en ese orden.
En situaciones en las que también se ponen en riesgo a los demás, están las multas por invadir la ciclovía, circular sin luces, pasarse la luz roja del semáforo, así como invadir el espacio peatonal, entre otras causas, como llevar a más de dos personas o menores de edad, aunque son las razones por las que son menos infraccionados.
El tipo de motocicletas que más se ven involucradas en accidentes viales son las de baja cilindrada, de 250 centímetros cúbicos o menos, como las Italika o Vento, que regularmente son usadas para el trabajo de repartidor.
Ese mismo tipo de moto es la que puede verse en rodadas como la del Terror, en la que participan personas de entre 18 y 30 años, quienes circulan con menos precaución que las agrupaciones organizadas de bikers, refirió Rodríguez Saavedra.
En marcha
El operativo Salvando Vidas de la SSC arrancó en enero del año pasado.
– Las zonas para realizar el operativo son aquellas intersecciones con mayor incidencia de accidentes de tránsito, como los ejes viales y vías de acceso controlado como Periférico y Circuito.
– Lo hacen en puntos itinerantes y en distintos horarios para tener menos personas accidentadas.
– Para garantizar la legitimidad del operativo no sólo acude personal de Tránsito, sino de Derechos Humanos, Asuntos Internos y otros.