Después de que el Gobierno federal se negó a entregarle los fondos solicitados para la elección judicial, al Instituto Nacional Electoral (INE) sólo le alcanzó para contratar a 300 de 600 monitoristas encargados de fiscalizar las actividades e informes de 3 mil 422 candidatos a juzgadores federales y de unos 4 mil locales.
El Gobierno federal dio al INE 7 mil millones de pesos, de 13 mil millones solicitados para la organización de la elección del Poder Judicial.
El director de la Unidad de Fiscalización del INE, David Ramírez, informó que ante la falta de personal están revisando actos de candidatos de manera aleatoria.
«Están acudiendo selectivamente a los eventos porque no nos da para ir a todos. La selección es aleatoria, salvo cuando prevemos eventos grandes derivados de lo que observamos de lo que publican en redes sociales», expuso el funcionario.
En un proceso electoral normal, los partidos son los que realizan el reporte de gastos de sus candidatos en el sistema que crea el INE exclusivamente para este fin, por lo que en este proceso son los aspirantes quienes deberán reportar sus gastos.
La inexperiencia en este proceso ha generado una infinidad de problemas técnicos, por lo que diariamente el INE recibe decenas de llamadas de candidatos solicitando asesoría.
Muchos aspirantes han reportado pantallas en blanco, las cuales se deben, explicó el funcionario, a que se dejan sesiones abiertas con más de 30 minutos de inactividad.
«El sistema no ha tenido ninguna falla técnica. Las soluciones están a un telefonazo de distancia», ofreció.